viernes, junio 26, 2015

Elévate a las alturas, suelta la vida congelada.

Ludmila Osa L 

 “Es mejor, por noble audacia, correr el riesgo de vernos expuestos a la mitad de los males que anticipamos, que permanecer en una cobarde apatía por miedo a lo que pudiera suceder”.
Herodoto


Hemos comprado necesidades innecesarias, los medios de comunicación masivos, durante muchos años han ayudado a creer que la vida es algo monótono, sin cumbres, ni valles, algo seguro, algo estable, donde no pasa nada, algo que hay que controlar todo el tiempo, llegando a una vida gris, volviéndonos grises, en este gris mediocres, con vidas cómodas y acomodados, no me muevas…!!, no te muevas…!!, no vaya a ser que me dé cuenta que esto no es lo que quiero, que esto no me hace feliz, que esto no me llena de vida…, me llena de comodidad…, de seguridad.

¿Estás buscando una especie de hermosa prisión para poder vivir sin conciencia?. Por que la vida no es eso, estás viviendo en un desgaste innecesario buscando esa seguridad, Dios no es eso, la vida y Dios es misterio, incertidumbre, inseguridad, eso lleva a vivir en conciencia, a sentirte realmente pleno y vivo. Recuerda los momentos de crisis…, Han sido angustiántes y difíciles, pero te han llevado a moverte, a intentarlo de forma diferente, te han llevado a sentirte vivo. Un hombre realmente vivo siempre se sentirá inseguro. ¿Qué seguridad puede tener?

La vida no es un proceso mecánico, no somos máquinas, la vida es un misterio, una incertidumbre, no se puede saber que va a pasar, ¿de qué puedes estar seguro mañana?, si supiéramos lo que va a pasar la vida se convertiría en algo falso, sin libertad. No puede haber una vida segura porque una vida segura es peor que la muerte. La vida está llena de incertidumbre, esto es lo que la hace realmente hermosa, las mil posibilidades que existen en cada momento, llena de sorpresas, ¡esa es su belleza!.

A mi entender lo que nos hace seres humanos es la libertad, si le tenemos miedo, nos congelamos, al hacerlo, estamos cediendo nuestra libertad a otros, si la tomamos por el mango aceptamos la incertidumbre de formar nuestro propio andar, esto es la valentía de la vida, de estar vivos, de tomar riegos, con todas las posibilidades en la mano, abiertas para nosotros, sin nada fijo, en constante creación, nuestra creación, en co-creación con el Cosmos, estando alerta, despiertos. Para mi está bien que sea así, por que transforma constantemente mi vida, por que la transforma en libertad, en una sorpresa constante, con grandes asombros, me mantiene permanentemente maravillada y la sorpresa y el asombro me hacen sentir la vida dentro de mi, sentirme conectada con todo, cobijada por la existencia misma, de la Tierra, de los árboles, del viento, de los pájaros, esa es mi pertenencia, mi principio y mi retorno.

“No la llames incertidumbre, llámalo prodigio.
No la llames inseguridad, llámalo libertad”.
Osho

lunes, junio 22, 2015

Reflexión sobre Libertad, Felicidad y Disciplina

Ludmila Osa L

Libertad, Felicidad y Disciplina, estos preceptos tan mencionados hoy en día. Los vemos y los leemos por todo lados, a veces podríamos pensar que se contraponen, que, ¿En la búsqueda de la felicidad se necesita que la libertad se sacrifique?. o ¿Libertad y disciplina se contradicen o complementan la una a la otra?.

Son conceptos que separados anhelamos en la vida cotidiana. Muchas veces se quedan como ideales, difíciles de entender, mucho más difícil de experimentar, si a esto le incluimos ¿Responsabilidad?, el asunto se complica todavía más..., en mi experiencia he reconocido que van muy de la mano, en este momento he logrando entender que haciéndolos parte de una postura, los logro alcanzar, me enfoco en uno, que se recarga o se apoya en otro, a su vez éste, es parte de un tercero y sucesivamente se van complementando, sin pasar por alto que constantemente voy eligiendo, si le sigo por donde voy o es momento de dar la vuelta, re-acomodar y continuar.

Dice el budismo: “No se comprende primero y luego actúas. Cuando comprendemos, esa compresión absoluta es la acción”,  

En occidente solemos hacer las cosas al revés, ¡no importa!, el punto es que hemos experimentado mucho, podemos usar esas experiencias como punto de partida, hacer una pequeña recapitulación tratando de entender lo que ya vivimos, trayendo al presente, aquí y ahora, de que me doy cuenta, ¿qué he logrado comprender?, ¿qué comprendo hoy?. Si confiamos en estas palabras budistas y nos ponemos en manos de la creencia: “…que la comprensión me lleva a la acción…”. ¿Qué comprendo hoy que me ha llevado a actuar de forma diferente?, ¿qué ha ido transformando mi forma de actuar y responder a lo cotidiano?


En algunas situaciones, si no es que en la mayoría hemos sacrificado alguna; a veces la más importante para nosotros, con este ejercicio de recapitulación,  ¿qué podrías hacer para dejar de sacrificar lo importante…?, para mi entender pueden cohabitar juntas, se apoyan y se complementan.

martes, junio 16, 2015

Cada día es una oportunidad para hacerlo diferente...

Ludmila Osa L

Cada día es una oportunidad para hacerlo diferente; vernos y vivirnos desde una visión nueva, salir de la idea que tenemos de nosotros mismos, plantearte las cosas de otra forma, vivir una vida en abundancia, contemplando todo lo que la abundancia es: salud, amor, calidad de vida, riqueza material, libertad, verte como un ser único libre de ataduras sociales, familiares.

Ver la vida con claridad, sin lealtades impuestas o heredadas, reconociendo que hoy eres un Ser maravilloso, único y perfecto, en proceso de evolución y conocimiento en sí mismo, de crear un futuro luminoso, desde el estar presente; aquí y ahora, haciendo uso del derecho más hermoso, "la Libertad de elegir", hoy es el día para verlo como tu objetivo; dejar de ver los obstáculos, ve lo que te hace ser quien eres, reconociendo lo que te mueve, llevando tu vida hacia la realización de lo que falta, ya no veas lo que le hace falta a los demás; eso sólo provoca pérdida de tiempo, no te justifiques, lucha, vuélvelo a intentar, olvídate de las culpas, de los juicios, esas son formas viejas de ver las cosas, sólo tú sabes lo que anhela tu alma, hoy toma la iniciativa, reconoce tú importancia en este andar juntos, siente la paz interior de tu creación, de tu propio destino, sé tu creador, no te compares con nadie, siente el espíritu, recupera la inspiración que nutre  tu Ser, lo que te hace ser único, auténtico. Siendo el creador y responsable de la transformación en ti.

Despídete del pasado que te ata, que es doloroso. Como diría Osho: "evita a las personas ruidosas y negativas", evita a los que ya no se permiten soñar, a los que han renunciado a intentar, seguro no entenderán las ganas de hacerlo diferente, la transformación.

Reconoce hoy, aquí, que todo lo que has vivido, ha sido y es el cimiento necesario para Ser, hoy, la mejor versión de ti mismo, date permiso de verla, sentirla y experimentarla. Puede ser que te sorprendas!!!!


Om Shanti!

viernes, junio 12, 2015

Hemos dejado de soñar, hemos olvidado la magia...

Ludmila Osa L

Hemos creado un mundo de ideas, conceptos y cosas
Hemos dejado de creer en lo sutil y con esto diseñado sistemas a partir de lo tangible, concreto y material.
Hemos dejado de soñar, de inventar,
Hemos olvidado la magia, el mundo de la energía, de la posibilidad de crear con ella nuevas formas, nuevos medios de desarrollo.
Hemos puesto nuestro corazón y espíritu fuera de un contexto coherente, dentro de un plano que no entiende  de sensaciones, que se expresa en un lenguaje diferente. Desconectándonos de toda sustancia, olvidando lo sencillo, lo apacible de cada momento, haciendo casi imposible creer que se puede vivir sin todo el mundo ilusorio que hemos creado.

Vivimos sin asombro, nos da vergüenza manifestarlo, con cara  de “aquí no pasa nada…”, “no siento nada…”, refugiándonos en un mundo de exigencia, control y estructura, logrando con esto evadirnos de nosotros, creyendo que así nos volvemos intocables, que esta postura nos mantiene fuera de peligro y sufrimiento.

¿Qué logramos con esto?

Una vida que no nos llena, vivir endebles, sin arraigo, sin conexión a la fuerza de la naturaleza, a la fuerza básica de este planeta, como si no pisáramos el suelo, con esto nuestro cuerpo y mente se mantienen sin vínculo, caminando en direcciones opuestas, siempre luchando con ese instinto natural, con esa sensación interna que nos dice que algo no está bien, que algo está fuera de lugar, chueco…

¿Qué se le va hacer? es ahí donde vivimos, esa es hoy la realidad, nos costo años cristalizarla de esta forma, claro que la podemos cambiar, hoy en día muchas personas y movimientos están en ese intento, nos quedaría unirnos a él comenzar a definir una nueva forma.

A mi me gusta cerrar los ojos he imaginar lo indispensable, antes de la revolución industrial, antes de que las máquinas sustituyeran la fuerza de trabajo del hombre, ¿cómo eran las cosas en ese momento?, ¿cómo se vivía…?, había más espacio, los tiempos eran lentos, las cosas se iban desarrollando poco a poco…, (3 minutos de reflexión)...ya situándome ahí, recuperando mi conexión, mi fuerza básica, dejando que mi imaginación vuele y detalle las cosas lo mayor posible…, abrir los ojos recorrer mi casa, encontrar algo de lo que podría prescindir a partir de este momento, una cosa menos de que preocuparme a partir de ahora, aligerar mi vida, aligerar mi carga…,

Sólo una cosa a la vez, no vuelvas a la exigencia, que sea un movimiento suave pero contundente.

jueves, junio 04, 2015

Compararme con los otros me lleva a la frustración y la amargura..., me impide verme y reconocerme..

Ludmila Osa L

“Si te comparas con los demás, te volverás vano y amargado, pues siempre  habrá personas más grandes y más pequeñas que tú”
Fragmento del poema Desiderata

Si te comparas con los otros  comenzarás a sentir una dificultad innecesaria, comenzarás a sentir una ansiedad profunda, causada por una exigencia en ti de alcanzar lo que está siendo el tema de tu comparación, una exigencia de llegar al punto donde han llegado los demás, los demás…, esos otros que no son tú, que no han vivido tu misma historia, que no hablan como tu hablas, que no reconocen al Ser que eres detrás de esas palabras que dices y que te dices.

No es necesario que te compares con los demás, con lo que sienten o viven los demás, con lo que les está sucediendo a los otros, mira lo que te está sucediendo a ti. ¿es saludable?, ¿es nutritivo?, sin ninguna comparación, simplemente observa lo que te está sucediendo a ti, de lo contrario comenzarás a sentir que algo está mal, que no estás en el camino correcto, cada camino tiene su propio lenguaje, cada puerta abre una posibilidad única, el mundo está lleno de puertas que nos abren posibilidades particulares. Di sí, a ese camino que es para ti, di sí a todo lo que es, no renuncies, no elimines, no niegues lo tuyo, compararte con los demás, te  llevará a convertirte en una mala copia de los otros. Aprende a gozarte, a experimentar, a sorprenderte del compartir con otros, compartir tus diferencias, lo que nos enriquece juntos, lo que creamos juntos, aprende a cantar, a bailar, al silencio, a celebrar; cada camino tiene su belleza, un hermoso jardín está lleno de pájaros, árboles, flores, es hermoso por eso; un desierto, está lleno de dunas, de arena, de silencio, de contemplación, de atardeceres profundos. La belleza no se encuentra sólo en un color y sólo en un tamaño, la podemos encontrar en muchas formas, tamaños y colores, la diversidad nos enriquece, nos permite vernos diferentes y reconocernos en esa diferencia que creamos juntos, en esas posibilidades compartidas.


No trates para nada de ser algo que no eres, simplemente sé lo que tú eres, cualquier cosa que seas, está bien, por que te lleva a encontrarte a ti mismo y a nadie más; tampoco condenes a los otros, ni te preguntes ¿qué están haciendo o para qué lo hacen?, al hacer esto o bien comparamos o sentimos que los otros se lo están perdiendo o si no lo entendemos, comenzamos a ser agresivos, a tratar de destruir la vida de los demás o condenarlos, esto no nos ayuda en nada, esto es innecesario. Permite la individualidad, acepta la diferencia, cada uno se manifiesta a su propio modo, de su propia forma, sólo observa dentro de ti, si te sientes bien, si sientes que surge en ti un bienestar, entonces estás en el camino correcto, estás caminando por tu camino, ese camino único que es el tuyo.